Remodelación del área social (esencialmente sala y comedor), así como de la cocina de una vivienda unifamiliar. La casa fue construida hace más de 15 años; por lo que, ya le hacía falta una readecuación más que necesaria, destinada fundamentalmente a renovar y dar nuevos aires a determinadas zonas del hogar.

En lo que respecta al diseño interior, se usó el blanco mate en las paredes, que dotaron a los espacios intervenidos de una mayor sensación de amplitud y claridad. Destacando un gran espejo, dividido en cuadrículas, ubicado en medio del comedor, que actúa como punto focal de atención, aportando además la sensación de profundidad.

En los muebles escogidos, destacan por su parte el blanco, además variaciones de café y dorado. En los elementos decorativos se conjugaron tres materiales (madera, metal y cerámica) de forma enteramente armónica.

El estilo es contemporáneo, al que se impregnó un cierto estilo clásico. La iluminación distribuida de manera estratégica es otro de los puntos esenciales, brinda calidez y enfatiza determinados elementos de la decoración, acentuándolos a la hora de fijar la vista sobre ellos.